- 1.Qué es la huella de carbono
- 2.Cómo influye la huella de carbono en la reputación corporativa de una empresa
- 3.Cómo reducir la huella de carbono
- 3.1.Reducir la huella de carbono de manera individual
- 3.2.Reducir la huella de carbono en las empresas
- 4.Conclusión
¿Sabes cómo puedes mejorar la reputación corporativa de tu empresa? Reduciendo la huella de carbono.
Si te preguntas qué es la huella de carbono y cómo se puede reducir, aquí te lo explicamos todo.
Qué es la huella de carbono
La huella de carbono cuantifica el impacto de la actividad humana en el cambio climático. Y lo hace midiendo el rastro que dejan las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) en el medio ambiente.
El principal GEI es el dióxido de carbono, pero también lo son el vapor de agua, el óxido nitroso, el metano y el ozono.
Toda actividad (producción y consumo de bienes y servicios) contribuye a la emisión de GEI a la atmósfera. Por tanto, nos referimos tanto a la actividad de las industrias como a la de cada persona de manera individual.
Las empresas realizan actividades que producen GEI como, por ejemplo, la fabricación, el transporte o el consumo energético.
Por su parte, las personas originan una determinada huella de carbono en su vida cotidiana al desplazarse, alimentarse, consumir y utilizar recursos como la energía.
Conocer la huella de carbono de cada actividad es importante para tomar conciencia y poder llevar a cabo medidas e iniciativas para reducirla. Empezando por cada uno de nosotros en nuestro día a día y terminando por la actividad de la industria.
Todos podemos colaborar en la lucha contra el calentamiento global adoptando acciones respetuosas con el medio ambiente. En nuestra vida cotidiana y en la industria.
Hay que recordar que la huella de carbono no ha dejado de crecer en los últimos años. Se ha multiplicado por 11 desde 1961 y ya supone el 60% del impacto total del hombre en el medio ambiente, según Global Footprint Network.
Y es que la población mundial no para de crecer y, con el incremento de la población, las emisiones de GEI aumentan, teniendo un impacto directo en el calentamiento global, y los recursos del planeta se agotan más rápido.
Cómo influye la huella de carbono en la reputación corporativa de una empresa
La reducción de la huella de carbono en el ámbito industrial es una máxima que debe estar presente en toda compañía. Sobre todo si una empresa determinada quiere mantener y mejorar su reputación corporativa.
Nada puede hacer más daño a una empresa que ser catalogada como contaminante. Si la huella de carbono de una industria es elevada, esto perjudicará a su reputación corporativa.
En cambio, si una determinada empresa trabaja continuamente para reducir su huella de carbono y, por tanto, su impacto negativo en el medio ambiente, gozará de una excelente reputación.
Así que no hay nada más positivo que una empresa incorpore entre sus acciones de Responsabilidad Social Corporativa pautas para reducir su huella de carbono.
Cómo reducir la huella de carbono
Para intentar reducir la huella de carbono, lo primero es conocer en qué nivel se encuentra. Así seremos conscientes de lo que contaminamos y podremos poner límites a nuestras emisiones de GEI.
Para ello, existen herramientas para el cálculo de la huella de carbono que podemos utilizar fácilmente. Por ejemplo, la calculadora desarrollada por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para medir la huella de carbono.
Una vez que conozcamos su alcance, se pueden llevar a cabo múltiples acciones para reducir nuestra huella de carbono, tanto de manera individual como corporativa.
Éstas son algunas ideas:
Reducir la huella de carbono de manera individual
Cada persona puede reducir su propia huella de carbono con acciones tan básicas como éstas:
- Consumir productos de temporada y de proximidad. Así contribuimos a reducir las emisiones de GEI derivadas del transporte y de la conservación de los alimentos en cámaras frigoríficas.
- Ahorrar agua: date una ducha en lugar de un baño, cierra el grifo mientras te lavas los dientes o lavas los platos, etc.
- Consumir menos energía: desenchufa los aparatos eléctricos cuando no los estés usando, baja un grado la calefacción, aprovecha la luz natural antes que recurrir a alumbrado eléctrico.
- Utilizar electrodomésticos de alta eficiencia energética, que son más sostenibles y eficientes. Para ello, cuando vayas a comprarlos, no olvides mirar bien su etiquetado.
- Utilizar el transporte público en lugar de tu coche siempre que puedas. También puedes optar por otras soluciones de transporte como la bicicleta.
- Reduce la basura que produces, reutiliza todos los productos que puedas y recicla todo lo que se preste a ello.
- Apuesta por el consumo responsable. Compra productos de segunda mano y vende lo que ya no utilices. Para ello cuentas con nuestra plataforma, Donadoo, donde puedes comprar y vender aportando parte de las ganancias a proyectos sociales. Así no sólo reducirás tu huella de carbono, sino que practicarás la solidaridad.
Reducir la huella de carbono en las empresas
En cuanto al ámbito empresarial, nada mejor que poner en práctica medidas para reducir la huella de carbono para mejorar la reputación corporativa.
Para ello, cada empresa puede llevar a cabo iniciativas como éstas:
- Utilizar fuentes de energía renovables.
- Optimizar los procesos productivos apostando por la eficiencia energética.
- Mejorar la cadena de suministro y reparto reduciendo el consumo de materias primas y energía.
- Fomentar la economía circular.
- Participar en Donadoo con la venta de excedentes y productos fuera de temporada. Con esta acción, que contribuye a mejorar la reputación corporativa de cualquier empresa, se consiguen múltiples beneficios. La empresa reduce su huella de carbono, coloca su stock y, además, contribuye con proyectos sociales. Porque parte de los beneficios de sus ventas se destinan a ONGs.
Puedes mirar más ideas como los consejos de la Unión Europea (UE) para reducir la huella de carbono.
Conclusión
Como hemos visto, la huella de carbono es una medida importante del impacto que todas nuestras actividades tienen en el medio ambiente. Y reducir esa huella de carbono es esencial para mitigar el impacto del cambio climático en nuestras vidas.
Podemos hacerlo reduciendo nuestro consumo de energía en el hogar, utilizando medios de transporte sostenibles, reduciendo la compra y el desperdicio de alimentos, utilizando fuentes de energía renovables, reduciendo el consumo de agua y plásticos…
Al llevar a cabo medidas para reducir la huella de carbono, tanto individual como industrial, podemos contribuir a la lucha contra el cambio climático. Así crearemos un futuro más sostenible para todos.